Ley de Atracción: Rompe patrones mentales y vive en Abundancia

En una de sus acepciones, abundancia significa “gran cantidad de algo” y puede referir a riqueza, prosperidad y bienestar. Según las leyes de la abundancia, es probable que el pensamiento positivo esté directamente ligado a estas creencias.

Riqueza material: generalmente, asociamos la palabra abundancia con la riqueza. Y no está mal, claro que no. Solo que la riqueza no es solamente material. ¡Uno puede ser rico de tantas formas!

Riqueza espiritual: esta proviene del alma, de los dones, de la capacidad de amar, de dar, de ser, de soñar, de imaginar. La abundancia de dones es lo que hace a las personas ser inmensamente ricas.

Riqueza humana: el capital humano es una de las formas más importantes de riqueza. Este capital está conformado por el esfuerzo, el talento, el conocimiento, la inteligencia. La educación es la forma de desarrollar el potencial de este capital humano.

“La imaginación es todo. Es la vista previa de las próximas atracciones de la vida”. Albert Einstein

En primer lugar, estar convencidos de que, como reza el dicho, “donde pongo el ojo, pongo la bala”. O sea que atraemos lo que pensamos.

¡Tampoco creer que esto funciona “como por arte de magia”! Lo cierto es que funciona, solo que no como todos quisiéramos. Si fuera tan fácil, todos seríamos inmensamente ricos.

Hay que ser muy cuidadosos a la hora de “pedir”. No es simplemente ir repitiendo como loros lo que queremos, sino imprimirle un verdadero sentimiento a nuestros deseos, que brote bien del alma.

Los pedidos deben ser muy puntuales. Uno puede lanzar al Universo un pedido de abundancia pero, si no especificamos qué tipo de abundancia es la que queremos… ¡cuidado con eso! Las cosas malas también pueden venir de forma abundante.

Por ejemplo, puedes pedir abundancia en amor, en salud y en dinero también, ¿por qué no? El dinero suficiente para tener una vida un poco más holgada, tal vez.

No basta solo con repetir palabras. Las afirmaciones deben ser concretas, puntuales, específicas, creativas, realistas, positivas, atractivas y poderosas. Que sean creíbles.

Creer es crear: significa que no es necesario ver para creer que algo existe, solo es necesario creer que eso existe, y de esta manera… ¡será creado!

Hay tres pasos previos antes de expresar nuestros deseos en palabras: la visualización, la emoción y el agradecimiento.

Buscar un momento de paz para poder tener una buena concentración.

Cerrar los ojos y calmar la mente.

Inhalar profundo y exhalar lentamente.

Dar paso a los deseos y recibirlos con amor.

Visualizar y concentrarse en que creer es crear.

Crear imágenes nítidas, como si ya las conocieras.

Desear con convencimiento lo que tu mente creó.

Si lo que está en tu mente te resulta indiferente no lo podrás atraer.

Observa cuál es la emoción que te despierta la imagen que has creado.

La emoción positiva le imprime una gran energía al pensamiento.

“No atraemos lo que queremos sino lo que sentimos”. Wayne Dyer

Antes de que se hagan realidad tus afirmaciones, pensadas con tanta emoción y amor, agradece todo lo que está por llegar a tu vida.

La suma de visualización, emoción, agradecimiento más las palabras expresadas, hará que tus afirmaciones sean poderosas. ¡Siéntete capaz de hacerlo porque te lo mereces!

-NIVEL 1: “LO QUE PIENSAS ATRAES”. Un pensamiento prolongado durante un lapso de tiempo determinado tiende a convertirse en realidad, por ejemplo, las personas que normalmente piensan en cosas negativas atraen a su vida situaciones negativas. Para poder atraer algo desde el nivel del pensamiento utiliza la imaginación o la visualización, pero con constancia.

-NIVEL 2: “LO QUE HABLAS ATRAES”. Él tiene un poder mucho mayor al pensamiento porque la energía sonora emitida es escuchada por todas las células del cuerpo, lo que hace que un porcentaje mucho más grande de ti ahora este trabajando a tu favor.

Si visualizas abundancia para tu vida, pero siempre hablas de crisis, de escasez la realidad que atraerás a tu vida será la que hablas. Un experimento científico ha demostrado que las personas que siempre hablan de robos, violencia, secuestros, quejas y demás situaciones negativas son altamente propensas según un alto porcentaje de probabilidad a que les ocurra o que le siga ocurriendo eso de lo que hablan, es decir crean esa frecuencia y se mantienen atrapados ahí.

-NIVEL 3: “LO QUE SIENTES ATRAES”: El campo magnético de corazón es mucho más grande que el campo eléctrico del cerebro, por lo tanto, la realidad que hay en el corazón tiende a ser la que se manifiesta físicamente. Por ejemplo, Las personas que normalmente tienden a sentirse tristes siguen atrayendo situaciones que les confirmarán su tristeza. La emoción sumada al decreto o al pensamiento tiene una mayor efectividad para crear tu realidad en un menor tiempo.

-NIVEL 4: “LO QUE VIBRAS ATRAES” La emoción y vibración son diferentes, La emoción nace en el corazón, y la vibración se irradia desde el plexo solar. Cuando llegas al punto de la vibración atraes a tu vida más de esa misma frecuencia. Vibras en amor y atraes más amor manifestando mejores resultados en todas las áreas de la vida. Cuando has llegado al punto de la vibración has manifestado lo que se denomina un estado de Ser, el nivel de atracción en su máxima expresión.