Baño con Café. Abre-Camino ☆

Como su nombre indica, este Baño es Abre Caminos. Los baños espirituales nos ayudan a depurar energías negativas y obtener energías positivas renovables. Es un poderoso baño de limpieza que consigue desbloquear todo aquello que no nos permite avanzar en la vida.

Tanto en lo económico amoroso y salud. Requieres un puñadito de café molido o, en su defecto, puedes emplear un puñadito de granos de café.

2 cucharadas de sal de cocina (o también podrías emplear la mágica sal del Himalaya o la sal marina).

Y, del mismo modo, se requieren 2 cucharadas de azúcar (ya sea blanca o morena).

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Este Baño se realiza por 3 días seguidos. En los dos primeros días se realiza a modo de Baño Amargo, únicamente con Café y Sal y el tercer día se sustituye la sal por azúcar, realizando así un endulzamiento en nuestro camino.

Para comenzar, puedes elegir cualquier día sin importar la Fase Lunar, para realizar el Baño. No importa el momento del día, sin embargo, sí que será importante que cuentes con los ingredientes y con ganas de mejorar al más alto nivel tu vida.

Si no te sientes animada o percibes negatividad, te recomiendo que lo dejes para otro día.

Incluso puedes realizar una pequeña meditación antes de comenzar en la que visualizarás cómo los obstáculos de tu camino se alejan de tu vida y te renuevas física y espiritualmente.

Comienza calentando en una olla u otro recipiente, y con un fuego muy lento, aproximadamente un litro de agua.

Puede ser tanto agua mineral, de lluvia o agua embotellada adquirida en un supermercado.

Una vez comience el agua a hervir, dependiendo del día introduce los siguientes elementos:

Añade el puñadito de café (recuerda, no importa que sea café molido, o en grano) y dos cucharaditas de sal.

Añade el puñadito de café y dos cucharaditas de azúcar.

A partir de ahora, deja todos los ingredientes cociéndose a fuego lento mientras hierven durante 5 o 6 minutos.

Una vez transcurrido el tiempo, aleja del fuego la olla y déjala enfriar.

Ya en la ducha (¡Recuerda asegurarte que el agua está a una temperatura agradable!) comienza aclarando tu cuerpo con agua y, después, echa el agua ritualizada desde la cabeza hasta los pies.

Una vez hayas rociado todo tu cuerpo con el agua del Baño, te bañas normalmente como lo harías.

Al salir, sécate con una toalla (si es posible de color blanca, ya que ayuda neutralizar la negatividad) con pequeños golpecitos.