La clave está en las energías combinadas de tu entorno, tu cuerpo y el interior de tu casa. Se trata de una receta delicada de 3 ingredientes que deben ser mezclados cuidadosamente para lograr la fórmula perfecta.
Cada persona, por sus peculiaridades y su modo de vibrar, necesita de un tipo de hogar diferente, con una decoración, distribución, colores y texturas.
Además, el entorno y la localización de una casa afectarán de manera diferente a cada persona, de acuerdo con las energías de esa persona.
Por ello, la labor de un buen estudio de Fengshui consiste en saber mirar al entorno, al interior de tu casa y a mirar las energías con las que vibras para elaborar la receta perfecta para la Armonía y el Equilibrio.
A menudo nos preguntamos cuáles son las claves que hacen que un lugar sea propicio y apropiado para nosotros.
Supongo que alguna vez has llegado a un lugar por primera vez y te has sentido como en casa. En otras ocasiones, ha ocurrido lo contrario y has podido sentir cómo una parte dentro de ti rechaza ese lugar.
Las buenas o malas energías de un lugar vienen determinadas por un delicado equilibrio entre 3 factores:
- El entorno y el área geográfica. No es lo mismo vivir junto al mar que en lo alto de una montaña, del mismo modo que las energías de un bosque no son las mismas que las de una casa al pie de una carretera.
Cada persona experimentará estas energías de una manera diferente.
Nuestro carácter viene también marcado por el lugar en el que vivimos y por las condiciones geográficas y el clima de nuestro entorno.
Somos donde vivimos y las energías del entorno de nuestro hogar nos condicionan hasta tal punto que pueden determinar nuestra predisposición a enfermar e influenciar nuestro estado emocional.
Por eso, es esencial estudiar las características energéticas de cada persona y conocer el lugar en el que vive, para detectar posibles desequilibrios a corregir.
Debes aprender a descifrar las energías asociadas a las plazas, parques, carreteras y edificios que te rodean.
- Las energías con las que vibra tu cuerpo. Tu fecha de nacimiento, tu familia y las energías que has heredado determinan los que llamamos “Arquetipo energético” que hace que tu cuerpo vibre de una manera única y determine qué ambientes son más o menos apropiados para ti.
Muchas personas piensan en lo maravilloso que sería poder decorar la casa de sus sueños y la mayoría desconoce lo sencillo que puede ser.
A menudo asociamos la casa de nuestros sueños con los ideales de las revistas de diseño y de decoración, pero casi nunca nos preguntamos si esa casa que vemos en las fotos nos conviene o no.
En publicaciones anteriores he compartido contigo la posibilidad de conocer el Número de la Suerte o Ming Gua, como un primer modo de conocer el modo en que se manifiestan las energías en tu cuerpo. Conocer estas energías que te caracterizan es el ingrediente esencial para poder construir y modelar con tus manos la casa de tus sueños.
Comenzando por tus energías personales puedes conocer las direcciones en las que colocar tu cama o las que más te favorecen para descansar. También puedes conocer las habitaciones de tu casa en las que tu cuerpo estará en mayor armonía.
Por último, sabiendo la energía que te caracteriza, podrás conocer las horas del día en las que tus energías estarán más activas y las estrategias para modelar tu hogar y hacerlo vibrar contigo.
Podrás conocer materiales, texturas, colores y formas que harán que tu casa sea una extensión de tu cuerpo y que las energías fluyan en todos los aspectos de tu vida.
- Las energías de tu hogar. La distribución, los colores, los materiales y la disposición de puertas y ventanas determinarán el modo en que vibra tu casa.
El mundo del Fengshui tiene uno de sus pilares fundamentales en los 5 elementos. Cada uno de ellos representa un estado energético concreto del ciclo esencial del Yin y el Yang.
Este ciclo, que comienza con la Madera en Primavera y termina con el Agua en Invierno, se reproduce cada día con la madera en el amanecer y el Agua en la Noche y durante el año en las 5 estaciones de la tradición taoísta.
Cada rincón de nuestra casa nos muestra la presencia de uno de los 5 Elementos. La energía de cada uno de ellos está vinculada a una serie de formas, materiales y elementos de decoración con los que podemos potenciar la presencia de ese elemento, para lograr que ninguno de ellos esté debilitado ni prevalezca sobre los demás.
Una de las labores del Fengshui será tratar de encontrar el equilibrio y la resonancia entre estos 5 Elementos en cada estancia del hogar.
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