Aprende a identificarlos y evita convertirte en uno de ellos. Cada persona tiene asignada una carga de energía, que debe aprender a utilizar y no desperdiciar. Esta energía permite trabajar con motivación para afrontar las situaciones del día a día. No obstante, ya sea por cuestiones personales o por ladrones de tu energía, esta puede ‘debilitarse’ y hacerte sentir que merman tus capacidades, entonces no tienes ganas de hacer nada, te cuesta un montón activarte, te sientes débil, y eso termina traduciéndose en tu vida como la falta de salud, dinero, trabajo etc.
QUEJAS CONSTANTES: Deja ir a personas que sólo llegan para compartir quejas, problemas, historias desastrosas, miedo y juicio de los demás. Si eres tu quien siempre se queja aprende a mirar el lado positivo de las cosas, todo tiene algún lado bueno empezar a ver la parte positiva.
PROMESAS INCUMPLIDAS: Las promesas, por pequeñas que sean, pueden tener un valor muy significativo para las personas a las que se les ha prometido algo. Cumplir las promesas te hace mejor persona, tanto a nivel personal como a nivel profesional. Los ladrones de tu energía no cumplirán jamás lo que prometen.
DEUDAS PENDIENTES: Ser responsable con las deudas ayuda a estar tranquilos ante las demás personas y con uno mismo. No hay nada mejor para tu propia tranquilidad que saber que no le debes nada a nadie y que nadie te debe nada.
ACUMULACIÓN DE OBJETOS: El desorden te absorbe energía. Si estas rodeado de cosas fuera de su lugar, acumuladas o incensarías te desconcentras. Cuando todo esta en lugar sientes más amplitud y tranquilidad.
DESECHA Y ORGANIZA: Desde las posesiones físicas hasta lo más espiritual, es muy importante prescindir de aquello que no se necesita, dejar atrás todo lo que sea pasado y tomar sólo aquellas cosas que permitan organizarse para vivir bien el presente y cumplir los sueños a futuro.
Todo el mundo tiene la capacidad de distinguir cuáles son las personas que le aportan cosas positivas a su vida y cuáles son aquellas que quieren detener e impedir que los demás cumplan sus metas. Estas últimas son los ‘ladrones de tu energía’.
Si alguien busca un bote para echar su basura, procura que no sea en tu mente”, señala el dálai lama.
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