Para superar las adversidades y los obstáculos y para aumentar nuestra vitalidad y fuerza interior.
De hecho, el martes es, tradicionalmente, el día vinculado a los soldados. El martes, a la hora que le sea más cómoda, cuando esté seguro de que no será molestado, prepare su altar, purifique sus instrumentos, encienda una vela roja pensando intensamente en sus problemas, en las dificultades que tiene en sus relaciones con las personas, en el trabajo, en los estudios, en todos sus campos de acción, en los obstáculos que debe superar.
Recite esta plegaria:
-Por las vibraciones de esta vela roja, yo invoco la ayuda al Universo y los espíritus elegidos.
Ayudadme a superar sin dificultades este obstáculo (nombre claramente el obstáculo que prevé)
Ayudadme a mejorar mi relación afectiva con (cite el nombre de la persona que le interesa).
Ayudadme a mejorar mi relación con las personas que trabajan junto a mí (cite el nombre de la personas o personas que le interesan).
Alejad de mí toda negatividad, todo obstáculo y dificultad sobre el trabajo (o los estudios).
Aumentad mi resistencia al cansancio físico y mental.
Aumentad mi capacidad de rendir en el trabajo (o en los estudios).
Aumentad mi fuerza de voluntad.
Aumentad mi determinación para llevar a cabo los deberes que me he fijado (cite claramente de que se trata y lo que tendrá que hacer para lograr su objetivo).
Alejad de mí el cansancio, el desánimo y la frustración.
Protégeme frente a las influencias negativas en el desarrollo de mis deberes.
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